TERCIA DE ULEA 2017

Viticultura:
Tercia de Ulea cuenta con 45 hectáreas de viñedos propios situados en las fincas de Ulea, Los Charcos, El Portugués y La Alberquilla, en el municipio de Moratalla, Murcia. Estos viñedos se encuentran a una altitud de entre 700 y 800 metros sobre el nivel del mar, aprovechando la influencia del clima.
Elaboración:
Para la elaboración, se realiza un despalillado y estrujado suave, seguido de un prensado neumático tras el descube. La fermentación se lleva a cabo con control de temperatura en depósitos de acero inoxidable.
Envejecimiento:
El vino se somete a un envejecimiento de 12 meses en barricas de 300 litros, un 80% de roble francés (Alier) y un 20% de roble americano (Finesse). Tras el envejecimiento, el vino reposa durante un año en botella antes de su comercialización.
Añada:
La añada de 2017 se caracterizó por un verano extremadamente cálido, con temperaturas que superaron los 40°C en ocasiones. Estas altas temperaturas aceleraron la maduración de las uvas, resultando en una acumulación de azúcares y una disminución de la acidez. Sin embargo, el clima más fresco durante la primavera permitió un buen desarrollo vegetativo inicial. A pesar de la escasez de lluvias durante el periodo de crecimiento de la vid, las condiciones secas y las altas temperaturas redujeron el riesgo de infecciones fúngicas.
Clima:
El clima de la zona se caracteriza por inviernos fríos con nevadas frecuentes y veranos calurosos. Durante el verano, se producen grandes saltos térmicos de hasta 27°C entre el día y la noche. La pluviometría anual es de 350 litros/m2, con una distribución irregular a lo largo del año. Esta combinación de factores climáticos favorece una lenta maduración de la uva, lo que resulta en vinos potentes y con cuerpo.
Suelos:
Los suelos son arcillosos con un alto contenido de calizas. Esta composición proporciona una base sólida para el crecimiento de las vides y contribuye a la singularidad y carácter del vino.
Propiedades:
Vol. alc.: 15,5%
Descripción del vino:
A la vista, presenta un atractivo color rojo rubí, límpido y de capa media-alta.
En nariz, se perciben aromas intensos y francos de fruta roja y fruta madura. Notas dulzonas y frescas se entrelazan con toques tostados y especiados propios de su crianza en barrica.
En boca, se muestra fresco y sabroso, con una textura aterciopelada. La fruta, el alcohol y la madera se integran perfectamente, creando un equilibrio armonioso junto con el dulzor característico de la monastrell. Su paso en boca es sumamente agradable y perdura en el paladar.
Elaborador:
Las raíces de Bodega Tercia de Ulea se remontan al siglo XIII, cuando la Orden de Santiago creó la Encomienda de Moratalla después de la conquista de la región en 1242. La orden reservó las tierras de la finca de Ulea para el disfrute de sus comendadores, desarrollando y potenciando los viñedos y la bodega existente. Desde el siglo XV hasta el XIX, los vinos de Moratalla adquirieron gran prestigio, como se registra en las cuentas de la Encomienda y los protocolos notariales de la época.
Después de la epidemia de filoxera a principios del siglo XIX, la mayoría de los viñedos de Moratalla se perdieron, y la bodega prácticamente desapareció. Sin embargo, tras la muerte del último comendador, la Tercia de Ulea pasó a la familia Chico de Guzmán, que ha continuado la tradición bodeguera durante tres generaciones.
En 2004, la bodega se trasladó a La Casa de Labor, un edificio agrícola adyacente, para permitir su crecimiento y modernización. Este traslado ha permitido la actualización de la maquinaria y tecnología de elaboración, al tiempo que se mantiene el carácter artesanal en la producción. La bodega se dedica a la elaboración de vinos rosados y tintos de cosecha y crianza, así como vinos dulces. Está inscrita en el registro de la D.O. Bullas y sigue produciendo vinos que reflejan la calidad y la historia vitivinícola de la región.