ABADIA RETUERTA NEGRALADA 2017

Viticultura:
Los viñedos de Pago Negralada, situados en Sardón de Duero (Valladolid), se extienden por laderas orientadas al norte hasta una altitud que alcanza los 850 metros sobre el nivel del mar. Plantados entre 1991 y 1994, estos viñedos han madurado durante más de dos décadas, lo que les otorga una rica profundidad y complejidad.
Elaboración:
La cosecha se realizó del 14 al 15 de septiembre, seguida de una maceración muy breve de 9 días. La fermentación maloláctica se llevó a cabo en barricas, dividiéndose entre nuevas y usadas.
Envejecimiento:
El vino se afina en barricas de roble francés durante 16 meses.
Añada:
La añada experimentó un otoño e invierno con precipitaciones de solo 190 litros, insuficientes para recargar la capa freática y resultando en una producción de racimos un 30% menor a lo habitual. Se cultivaron áreas normalmente cubiertas de vegetación para evitar la competencia. La primavera temprana, con brotación en abril, y una floración adelantada en mayo, marcó la singularidad de esta cosecha. Los meses siguientes fueron más cálidos de lo normal, lo que adelantó la vendimia a finales de agosto y octubre. Esta añada se caracterizó por una maduración heterogénea y bajos rendimientos.
Clima:
El clima en los viñedos es continental, los veranos son cortos, calientes, secos y mayormente despejados, los inviernos en contrapunto son muy fríos, ventosos y parcialmente nublados.
Esta continentalidad regala inviernos muy fríos influenciando directamente en el viñedo. A veces hay heladas y por lo tanto nieblas, escarchas y ese frío ejerce un efecto beneficioso, manteniendo alejadas las enfermedades que afectan al viñedo (como el oídio), también ese efecto repercute en una brotación más tardía lo que hace que las heladas, si las hubiese, no le afecten a la calidad y al rendimiento de la planta. Además, hay que tener en cuenta que esta en una de las parcelas mas altas de la finca.
Suelos:
Los suelos son profundos con gravas y arena en superficie. Tienden a proporcionar una buena capacidad de drenaje y retención de agua, lo que puede favorecer un equilibrio adecuado entre el estrés hídrico y la disponibilidad de agua para las vides. Esto puede resultar en vinos con una buena concentración de sabores y aromas, así como una estructura equilibrada en boca. La combinación de drenaje adecuado y retención de agua también puede contribuir a la maduración óptima de las uvas, lo que puede reflejarse en la calidad y complejidad del vino final.
Propiedades:
Vol. Alcohol: 15,0%.
Descripción del vino:
Nariz con notas de fruta confitada y negra, como ciruelas negras, moras y cerezas picota, acompañadas de matices balsámicos y especiados de pino, regaliz negro y humo.
En boca, se percibe profundo, vibrante y con taninos austeros.
Elaborador:
Desde 1988, fecha en la que nace el proyecto de Abadía de Retuerta, los esfuerzos se han multiplicado. No solamente para conseguir recuperar la cultura, el viñedo y las tradiciones ancestrales que rodeaban a la propiedad en esta abadía en el siglo XII, sino que el objetivo es el de expandir la cultura del vino a través de una experiencia única.
En 1991 se comenzó a replantar 700 ha de viñedo, repartidos en 54 pequeños pagos de características muy distintas. Cada uno de ellos plantados con una sola variedad, siendo mayoritaria la Tempranillo con un 70%. La Cabernet Sauvignon ocupa el 10%, la Syrah 10% y el resto se reparte entre Merlot, Petit Verdot y algunas variedades blancas.
En 1996 eran ya capaces de elaborar vinos de calidad.
La bodega que es una de las más innovadoras y tecnológicamente más avanzadas de Europa fue diseñada por el enólogo francés Pascal Delbeck y consolidada por el viticultor y enólogo Ángel Anocíbar (actualmente al frente de la bodega).
Detrás de esta recuperación de viñedos y su afán por hacer buenos vinos está la rehabilitación histórica y arquitectónica de su impresionante abadía de 1146, una de las estructuras románicas más importantes de la región que se llevó a cabo bajo la supervisión del arquitecto Marco Serra. Las obras comenzaron en 2008, albergando en su interior un hotel de 5 estrellas y respetando las dependencias de los monjes. Las actualizaron para brindar al huésped la comodidad necesaria. Cuenta también con Spa y un restaurante con estrella Michelin, todo milimétricamente diseñado para hacer vivir al que entra en ese dominio “una experiencia única”.
Puntuaciones:
Parker 93 puntos.
Peñín 95 puntos.
Producción:
21.224 botellas.