AD MIRTHYA 2017

Viticultura:
Los viñedos se encuentran en una altitud privilegiada de entre 700 y 800 metros sobre el nivel del mar. Aquí, coexisten viñedos de 40 años, que aportan profundidad y carácter, junto con viñas jóvenes, que transmiten frescura y vitalidad a este vino excepcional. La vendimia se realiza de forma manual, seleccionando meticulosamente las uvas en cajas de 12 kilogramos para garantizar la calidad y preservar su integridad.
Elaboración:
La elaboración de este vino se inicia con un despalillado y estrujado suave de las uvas, seguido de un prensado neumático preciso tras el descube. La fermentación tiene lugar en depósitos de acero inoxidable con un control riguroso de la temperatura, lo que permite preservar los aromas y sabores característicos de las uvas.
Envejecimiento:
Envejece en barricas de roble francés de 300 litros durante 6 meses, lo cual aporta complejidad y elegancia a su carácter. Posteriormente, el vino descansa en botella durante otros 6 meses antes de ser comercializado. Cabe destacar que se somete a un filtrado muy suave, lo cual puede dar lugar a sedimentos en la copa que no afectan a su calidad.
Añada:
La añada de 2017 se caracterizó por un verano extremadamente cálido, con temperaturas que superaron los 40°C en ocasiones. Estas altas temperaturas aceleraron la maduración de las uvas, resultando en una mayor concentración de azúcares y una disminución de la acidez. Sin embargo, el clima más fresco durante la primavera permitió un buen desarrollo vegetativo inicial. A pesar de la escasez de lluvias durante el periodo de crecimiento de la vid, las condiciones secas y las altas temperaturas contribuyeron a reducir el riesgo de infecciones fúngicas.
Clima:
El clima en la región es de tipo mediterráneo, con inviernos fríos y veranos muy calurosos. La pluviometría anual es baja, con alrededor de 340 litros por metro cuadrado. Estas condiciones climáticas favorecen la concentración de los sabores y aromas en las uvas, así como una maduración óptima.
Suelos:
Los suelos de la región son predominantemente arcillosos con un alto contenido de calizas. Esta composición proporciona una base sólida para el crecimiento de las vides y contribuye a la singularidad y carácter distintivo del vino.
Propiedades:
Vol. alcohol.: 13,5%
Descripción del vino:
A la vista, presenta un hermoso color rojo picota, que evoca la intensidad y vitalidad de este vino.
En nariz, muestra una finura y elegancia notables, con una seductora amalgama de aromas de frutas como frambuesas y moras, acompañados de sutiles notas florales.
En boca, se revela su suavidad y amplitud, con una entrada elegante que da paso a un carácter maduro y sabroso. Los suelos calizos del viñedo dejan su huella en este vino, aportando una marcada personalidad. AD Mirthya 2017 es un vino que cautiva con su expresividad y que refleja el cuidado y la pasión de las Bodegas Tercia de Ulea en cada copa.
Elaborador:
Las raíces de Bodega Tercia de Ulea se remontan al siglo XIII, cuando la Orden de Santiago creó la Encomienda de Moratalla después de la conquista de la región en 1242. La orden reservó las tierras de la finca de Ulea para el disfrute de sus comendadores, desarrollando y potenciando los viñedos y la bodega existente. Desde el siglo XV hasta el XIX, los vinos de Moratalla adquirieron gran prestigio, como se registra en las cuentas de la Encomienda y los protocolos notariales de la época.
Después de la epidemia de filoxera a principios del siglo XIX, la mayoría de los viñedos de Moratalla se perdieron, y la bodega prácticamente desapareció. Sin embargo, tras la muerte del último comendador, la Tercia de Ulea pasó a la familia Chico de Guzmán, que ha continuado la tradición bodeguera durante tres generaciones.
En 2004, la bodega se trasladó a La Casa de Labor, un edificio agrícola adyacente, para permitir su crecimiento y modernización. Este traslado ha permitido la actualización de la maquinaria y tecnología de elaboración, al tiempo que se mantiene el carácter artesanal en la producción. La bodega se dedica a la elaboración de vinos rosados y tintos de cosecha y crianza, así como vinos dulces. Está inscrita en el registro de la D.O. Bullas y sigue produciendo vinos que reflejan la calidad y la historia vitivinícola de la región.